El 8 de marzo de 1937, el carguero Mar Cantábrico, que se dirigía a España procedente de México, fue apresado por el crucero Canarias antes de que llegara al puerto de Santander. El diario The New York Times publicó que la detención se había producido tras una información proporcionada por el cónsul italiano en Veracruz y, probablemente, porque los sublevados habían interceptado un informe del ministro de Marina y Aire de la República, Indalecio Prieto.
El buque era una motonave, construida en Bilbao en 1930, que había sido enviada a Nueva York, de donde regresaba avituallada con un cargamento de garbanzos, medicinas, ropa, calzado, cañones, armas de fuego y hasta cuatro pequeños aviones y un bimotor. En su viaje de vuelta, hizo escala en el puerto mexicano de Veracruz, adonde llegó el 13 de enero de 1937. Su presencia no pasó inadvertida, ya que exhibía un enorme letrero que decía: “Gloria a México, la España antifascista os saluda”.
Este contenido no está disponible para ti. Puedes registrarte o ampliar tu suscripción para verlo. Si ya eres usuario puedes acceder introduciendo tu usuario y contraseña a continuación: